Enlace permanente
Enviado por Alejandro Valero el 31.05.06/20:57

¡Muy bueno, Luis! Ya he encontrado el blog de donde procede este texto. A todos nos gustan los libros, y yo estoy haciendo aquí de abogado del diablo.
Pero ocurre con los libros como con los coches. Para que los occidentales podamos tener coches es necesario que los demás países pobres no los tengan. Si todos los chinos tuvieran coche, este planeta ya no existiría. Si todos los chinos tuvieran libros, este planeta ya no existiría. Para que haya un rico tiene que haber muchos pobres.
Si queremos que todos los habitantes del mundo adquieran cultura y conocimientos (y no sólo de boquilla), habrá que emplear otros medios, y los libros no son la solución. Quizá lo sean los portátiles de 100 dólares de Negroponte, o aparatos parecidos. A Negroponte no se le habría ocurrido vender millones de libros por muy baratos que fueran...
Páginas dispersas -
http://fresno.pntic.mec.es/avaler3
© de la web y del diseño: Alejandro Valero.
Licencia de Creative Commons.